4. Aprovecha lo que ya tienes en el refrigerador
Después de armar tu presupuesto, revisa tu refrigerador, ya que, en muchas ocasiones tenemos todo lo que necesitamos para cocinar increíbles platillos en casa. Por ejemplo, si tienes jitomate, cebolla, ajo y un poco de cilantro, tienes todo lo que necesitas para preparar una salsa.
De esta manera, reducirás la cuenta del supermercado y también evitarás las compras innecesarias de productos que ya tienes en casa. Además, es el primer paso para mantener en orden tu refrigerador y despensa.
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