4. Mantenimiento regular
Para evitar futuras acumulaciones de grasa, coloca papel de aluminio en la base del horno para atrapar goteos y derrames. Realiza una limpieza profunda del horno cada tres a seis meses y límpialo regularmente para mantenerlo en óptimas condiciones.
Con estos consejos, tu horno quedará reluciente y listo para crear deliciosas recetas. Recuerda que un horno limpio no solo es una cuestión de higiene, sino también un reflejo de tu pasión por la cocina. ¡Prepara tus platos con estilo y sabor en un horno impecable!