2. No olvides la tapa
Es esencial que la olla que calientes para aprovechar su vapor esté bien cerrada. El motivo es que, de esta forma, conseguirás evitar que el vapor se escape y, por tanto, que los alimentos se cocinen correctamente. Además, si quieres mantener intactos los nutrientes de los alimentos también resulta esencial que estos no toquen el agua en ningún momento de la cocción.